La dieta mediterranea reduce el riesgo de infarto
Un estudio en el que han participado 17 grupos de investigación aporta una prueba clara de la protección cardiaca que confiere este tipo de ingredientes
Según sus datos, la dieta mediterránea, acompañada de aceite de oliva virgen extra o frutos secos, reduce la incidencia de problemas graves cardiovasculares en un 30%.
La investigación, que ha durado más de cinco años y en la que han participado 7.500 personas en España, demuestra que quienes seguían una dieta mediterránea rica en aceite de oliva o frutos secos vieron reducido 30% el riesgo de problemas cardiovasculares, como ictus o infartos, en comparación con quienes recibieron la indicación de seguir una alimentación baja en grasas.
"Nuestros datos apoyan los beneficios de la dieta mediterránea para la reducción del riesgo cardiovascular", afirman los investigadores. "Estos datos podrían explicar, al menos en parte, la menor mortalidad cardiovascular que se da en los países mediterráneos en comparación con los países nórdicos o los Estados Unidos".
"Este es el primer trabajo que utiliza dieta mediterránea 'de verdad' en el estudio de prevención de enfermedades cardiovasculares y los resultados han sido positivos y convincentes (esperamos) para aquellos que puedan poner en duda las ventajas de la nutrición y, sobre todo, del uso de las dietas tradicionales como este es el caso", reitera José M.ª Ordovás, director del laboratorio de Nutrición y Genómica del USDA-Human Nutrition Research Center on Aging de la Universidad de Tufts (EEUU).